En 2011 me invitaron a la semana de la moda de NY, con su Fashion Night Out y otras fiestas del momento. Me lo pase en grande y me salio un trabajo con Vogue Uk, asistiendo a la estilista mas maravillosa de todos los tiempos: Kate Phelan. El fotógrafo era Terry Richardson y la editorial llevaba por titulo NEW YORK COOL. Podéis imaginaros que por ahi pasaron los personajes mas increíbles que había visto en mi vida, desde diseñadores a modelos, cantantes y actrices... incluso iconos sexuales de la adolescencia a los que nunca tendría que haber conocido para que siguieran siendo tales.
Por eso este año, cuando vi que no podía ir a NYC (aun teniendo invitación), la FNO de Madrid se me planteaba demasiado pequeña como para repetir experiencia. Entonces me llego un mail recordándome que tenia que asistir a la fiesta en honor del Premio Novela Negra de RBA. NO PODÍA SER MEJOR. Nada que ver con la moda, una cena de gala con gente a la que no conocía de nada y sin oportunidad de traer acompañante, pues la asistencia era super controlada, en el Hotel Don Juan Carlos I. Muy 90's todo.
Me daba un poco de miedo y asco en las vegas ir sola así que lié a Ainhoa Rebolledo (autora, entre otras cosas, de Mari Klinski) para que fuera mi partenaire. Ainhoa consiguió un pase de prensa y nos dedicamos a beber cava y probar bocaditos de todas las maravillas que nos iban pasando por delante hombres uniformados, en bandejas relucientes.
Era como estar en una fiesta en casa de Steve (90210 Beverly Hills), con la piscina, los amigos de su madre y un tipo muy raro que parecía que le habían dejado la corbata para poder entrar.
Lo mejor o peor de todo, todavía no consigo clasificarlo, es que a la entrada de tan lujoso antro había un corrillo de gente manifestándose PORQUE LLEVAN MESES SIN COBRAR SU SUELDO. Los padres y madres de familias que han trabajado duro a cambio de un salario mínimo Y NI SIQUIERA ESO LES HAN PODIDO PAGAR. Es bochornoso la cantidad de comida y bebida que se derrocho durante la fiesta, la cantidad de dinero que se otorga al ganador de dicho certamen (que por otro lado no necesita para nada) y que nadie pueda pagarle a esta gente lo que es suyo.
El sushi estaba casi tan malo como los mojitos, los noodles precalentados eran un poco cutres y las brochetas ni tan mal. El cava muy rico y los postres increíblemente maravillosos. A mi me fallo el outfit a ultimo momento y tuve que improvisar, dejando mi habitación hecha un post-tsunami y llegando una hora tarde al evento (cosa que me fue muy bien porque así no tuve que aguantar el momento entrega de premio).
Como anécdotas: Preguntamos a un camarero a que hora la gente empezaba a despelotarse y se tiraban a la piscina, pero se ve que esta prohibido y si lo haces te echan y no vuelves a entrar en la vida. Si no me creéis preguntadle a Ana S. Pareja, me contaron que hace años lo sufrió en sus propias entradas carnes. La segunda mención risible es que comentan en algunos círculos que el escritor se auto enviaba mails de admiración desde distintas cuentas como si fueran anónimos de fans. PENOSO si es verdad, aunque de lo triste que seria creo que hasta me gusta. Al llegar tarde no se muy bien que paso, pero creo que alguien se enfado mucho y monto un cirio, dicen que por lo del ganador, pero yo creo que mas bien pidió un mojito, Y ES QUE LOS HACÍAN CON AGUA VICHY CATALAN.
Ya sabéis, agua con gas.
Ainhoa y el foton que le hice
El único tío así joven y bien vestido de toda la gala ( aparte del violonchelista y el técnico de sonido). Si, es gay.
La cruda realidad es que ya no hay carne cruda.
No he oído nunca el programa pero me han dicho que el locutor decía cosas en plan quememos la moncloa y fue en lo primero que pensé cuando vi este cartel.
Lo mejor de la fiesta
La entrada, entre Cenicienta y David Lynch.
Ainhoa esta que para el metro
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