Dicen que no hay nada mejor que una gran gala para confirmar una tendencia y los Golden Globes 2013 fuero prueba fehaciente de ello. Dejando a un lado las pobres que mostraron pierna a lo Angelina y el monotematico color nude; el atrevimiento por las transparencias, la gama metálica y los tonos violeta fueron los mas comentados de la noche.
Aunque en estos tiempos moderados la mayoría de las estrellas optaron por la apuesta segura (rojo, muy poco favorecedor en el diseño de Versace que lucia Claire Danes; negro, con Kirsten Wiig y ese maravilloso escote de Michael Kors; o la cromática blanco/beige y derivados), no faltaron las pocas atrevidas que acertaron al mas puro estilo de Brian Slade.
Estamos hablando de la mujer de Jon Hamm (esta pobre mujer que por mas papeles que haga sera siempre recordada por su atractivo marido) con un elegante pero nada desapercibido vestido púrpura de Naeem Khan o de Julianna Marguiles, nominada por The Good Wife, que optó por las transparencias de Pucci o tambien de Nicole Ritchie a lo Ziggy Stardust con un maquillaje colorido y vestido (repetimos) de Naeem Khan. Estas tres mujeres tan diferentes entre ellas, se suman a esta tendencia que poco a poco va ganando adeptos.
Julianne Moore como siempre exquisita, no quiso decantarse mucho aunque su Tom Ford algo quería insinuar de esa época en la que los chicos llevaban plataformas y el algodón era un tejido se diría casi desconocido para la moda.
Entre las que no acertaron en esta gala se encuentra Rachel Weisz, aunque no fue de las peores. Kate Hudson sin embargo estaba deliciosa en un Alexander McQueen negro con apliques dorados y joyería de Jennifer Meyer.
Mención a parte merece Lucy Liu, creo que salio a medio rodaje de Alicia en el país de las maravillas y no le daba tiempo a cambiarse. Algo parecido debió sucederle a Marion Cotillard, que había quedado con unas amigas para tomar algo en Manhattan y se acordó de golpe de lo de los premios, y se vino así, simple.
They say there's nothing better than a great gala to confirm a trend, and the 2013 Golden Globes are a proof of that jurisdiction. Leaving aside the poor ones trying to emulate the showing leg of Angelina and the monothematic nude color; the boldness of the transparencies, the metallic range and the violet tones were the most talked about of the night.
Although in these moderate days most of the stars opted for the safe bet (red, very unflattering the Versace in Claire Danes, black, with Kirsten Wiig and that wonderful Michael Kors neckline, or the color white / beige and derivatives), there were still a few adventurers that matched the purest style of Brian Slade.
We're talking about Jon Hamm's wife (this poor woman who for more roles that will do she always be remembered for its attractive husband) with an elegant but not unnoticed purple Naeem Khan dress or Julianna Margulies, The Good Wife nominee who chose a Pucci with transparencies or also Nicole Ritchie a la Ziggy Stardust with colorful makeup and dressed (again) of Naeem Khan. These three women as different one from another,dressed so similar it's a sign that this trend is slowly gaining popularity.
Julianne Moore as always exquisite, was not opting much, although its Tom Ford wanted to suggest something of that age when boys wore platforms and the cotton fabric you would say was nearly unknown to fashion.
Among those not clearly inspired at this gala was Rachel Weisz, though it was not the worst. Au contraire Kate Hudson was delicious in a black Alexander McQueen with little golden appliques and Jennifer Meyer Jewelry.
Deserving an apart mention is Lucy Liu. I think maybe she was filming Alice in Wonderland and she had no time to change before the gala... Something similar happened to Marion Cotillard, who maybe was with some friends for a drink in Manhattan and suddenly remembered about the Golden Globes, and came dresses for a girls nite out, instead of a glamorous gala.
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